Blog

SALVE MARÍA REINA
El Señor nos convoca. Familia les informamos algunos detalles sobre estos próximos dos días de celebración en nuestros encuentro con el Señor los cuales en efecto conllevan cierto sacrificio en la puntualidad :

Leer Más

Examen de conciencia -breve-

 

LOS DIEZ MANDAMIENTOS: Los tres primeros mandamientos se refieren a nuestra relación con Dios. Los otros siete se refieren a la relación con el prójimo.

Esto corresponde a la enseñanza de Jesús cuando dice que hay dos mandamientos: el primer mandamiento es amar a Dios con todo el corazón, alma… El segundo: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

1.- “Amarás a Dios sobre todas las cosas”
¿He negado o dudado deliberadamente alguna verdad de la fe? ¿He leído libros, revistas o periódicos contra la moral o la fe? ¿He pasado mucho tiempo sin rezar? ¿Me he desesperado hablando contra la Providencia? ¿Me he confesado sin arrepentimiento o sin proposito de enmienda? ¿He cometido sacrilegio callándome, a sabiendas, pecados mortales en confesión, por vergüenza? ¿He abandonado el deber de adquirir una mayor cultura religiosa? ¿Me he avergonzado de ser y mostrarme católico?.

2.- “No tomarás el nombre de Dios en vano”
¿He dicho blasfemias o palabras injuriosas contra Dios, los santos o cosas santas? ¿He jurado sin necesidad o por mala costumbre? ¿He dejado de cumplir algún voto o promesa grave? ¿He dicho chistes irreligiosos? ¿Me he burlado de las personas buenas por el simple hecho de ser buenas? ¿He tenido falta de respeto dentro del templo?

3.- “Santificarás las fiestas”
¿He faltado los domingos o días festivos a Misa? ¿Me he distraído voluntariamente en Misa? ¿He llegado tarde? ¿He impedido a otros ir a Misa? ¿He trabajado en día de fiesta sin necesidad o hecho que otros trabajen? ¿Perteneces a sociedades prohibidas (masonería, comunismo…)? ¿He cumplido con el mandamiento de comulgar, al menos, por Pascua de Resurrección? ¿Dedico parte de mi tiempo libre en obras de caridad o apostolado?.

4.- “Honrarás a tu padre y a tu madre”
HIJOS: ¿He desobedecido a mis padres en cosas justas: no trabajando o estudiando cuando me lo mandaban, llegando tarde a mis obligaciones, andando con malos compañeros, no apartándome de espectáculos y diversiones malas? ¿Los he tratado con dureza, faltándoles al respeto de palabra o de obra? ¿Me he avergonzado de mis padres ante los demás? ¿Los socorro en sus necesidades? ¿He reñido con mis hermanos? ¿Les he dado mal ejemplo? ¿Me he dejado llevar de la envidia si se destacaban en algo más que yo? ¿He sido causa de que se rompa la paz familiar? ¿Les he ayudado en lo que necesitaban, tanto material como espiritualmente? En caso de haber muerto, ¿me acuerdo de rezar por ellos y ofrecer alguna misa por su alma?.

PADRES: ¿Educo a mis hijos convenientemente en la religión y en las buenas costumbres? ¿Los corrijo con cólera o injustamente? ¿Les atiendo en lo que necesitan de vestido y comida? ¿Los maltrato o les deseo algún mal? ¿Los tengo demasiado mimados? ¿Permito que anden ociosos o vagos? ¿Permites que tus hijas se vistan indecentemente o que frecuenten diversiones peligrosas: bailes inmodestos, compañías dañinas, novios de diversión…? ¿Los esposos entre sí, se tratan amable y cariñosamente? ¿Discuten o riñen? ¿delante de los hijos? ¿Se maltratan entre sí, física o verbalmente? ¿Malgastas el dinero en vanidades y vicios?

5.- “No matarás”
¿He hecho daño de palabra o de obra a otros? ¿Se lo he deseado de corazón? ¿Tengo odio o rencor a alguien? ¿He hecho algo contra mi propia vida o mi salud? ¿Me he emborrachado? ¿He tomado droga o deseado tomarla? ¿He mantenido opiniones a favor del aborto, crimen abominable? ¿He participado en un aborto, eutanasia, crimen de algún tipo? ¿Me he vengado de alguien o tenido deseos de venganza? ¿Me he entristecido de que a otros les vaya bien o me he alegrado de que les vaya mal? ¿He tenido paciencia con las flaquezas del prójimo? ¿Me he dejado llevar por la vanagloria o la vanidad? ¿He negado el perdón a alguien? ¿Tengo mal genio y riño sin motivo? ¿He dado a alguien un disgusto grave sin razón?.

6 y 9.- “No cometerás actos impuros” y “No consentirás pensamientos ni deseos impuros”.
¿Me he deleitado en pensamientos y deseos impuros? ¿He mirado, leído o hablado cosas deshonestas? ¿He contado chistes o cantado canciones deshonestas? ¿He mantenido conversaciones indecentes? ¿He tenido alguna acción deshonesta conmigo mismo o con otros? ¿Había alguna circunstancia que agravase dicha acción: parentesco, matrimonio, consagración a Dios, menor de edad…? ¿Mantengo amistades que son ocasión de pecado en esta materia? ¿He bailado con intención deshonesta? ¿He hecho gestos deshonestos? ¿He procurado rechazar desde el principio cualquier pensamiento o deseo deshonesto? ¿He dicho palabras groseras o malsonantes? ¿He caído en la pornografía, contemplando imágenes, escuchando conversaciones impuras, asistiendo a actos inmorales? ¿He invitado a otros también a participar de estos actos o mirar imagenes indecentes? En el noviazgo: ¿me acerco con más frecuencia a los sacramentos de la Penitencia y de la Comunión para tener más gracia de Dios? ¿Me está alejando de Dios esa relación? ¿Mantengo esta relacción sólo por pasatiempo y diversión? ¿Engaño a mi novio/a para que no me conozca realmente como soy? ¿He tenido deseos deshonestos aunque no los haya llevado a cabo?.

7 y 10.- “No robarás” y “No codiciarás los bienes ajenos”
¿He robado algo? ¿Con violencia o a una persona pobre o en un lugar sagrado o con alguna otra condición agravante? ¿He restituido lo robado pudiendo hacerlo? ¿He comprado o vendido algo sabiendo que son objetos robados? ¿He jugado cantidades grandes de dinero? ¿He hecho trampas en el juego? ¿Derrocho el dinero? ¿He cooperado con robos ajenos? ¿Retengo lo ajeno contra la voluntad de su dueño? ¿Tengo codicia excesiva, envidia a los ricos, me quejo a Dios por no tener más riqueza? ¿Llevo con sentido cristiano la carencia de cosas necesarias? ¿Ayudo a la Iglesia en sus necesidades? ¿Doy limosna de acuerdo a mis ingresos? ¿He usado bien mi tiempo, mis fuerzas, los dones que Dios me dio? ¿Los he puesto al servicio del prójimo? ¿Me he dejado llevar de la pereza y la ociosidad?.

8.- “No dirás falsos testimonios ni mentirás”
¿He mentido con perjuicio grave para mi prójimo? ¿He murmurado? ¿He oído murmurar con gusto? ¿He defendido la fama del prójimo, pudiendo? ¿He descubierto, sin causa justa, defectos graves de otras personas? ¿He abierto o leído correspondencia ajena que sus dueños no querían que se leyera? ¿He escuchado conversaciones contra la voluntad de los que las mantenían? ¿He ido con chismes de unos a otros? ¿He exagerado los defectos de otros? ¿He ridiculizado al prójimo? ¿He calumniado? ¿He juzgado mal del prójimo sin suficiente motivo?.

INDICACIONES GENERAL POSTURAS CORPORALES

EN LA SANTA EUCARISTÍA EN DOMUS VITAE

 

Según las orientaciones oficiales de la Iglesia Universal y su tradición y magisterio

«La uniformidad de las posturas, que debe ser observada por todos participantes, es signo de la unidad de los miembros de la comunidad cristiana congregados para la sagrada Liturgia: expresa y promueve, en efecto, la intención y los sentimientos de los participantes» (Instructivo Misal Romano, 42.)

Leer Más

La CONSAGRACIÓN tendrá una duración de 30 días del 08 de septiembre (Natividad de la Virgen) al  07 de Octubre (Ntra. Sra. del Rosario) del 2022; dicha preparación consta de algunas oraciones, texto bíblico, lectura  y actividades espirituales diarias como preparación consciente para la renovación o consagración a Jesús en María. Si continuas interesado deberás participar de lo siguiente:

Leer Más

ULTIMO DIA DE LA PREPARACIÓN
Descripción del día:
Recuerda vivir tu Santa Eucaristía y tu Santo Rosario diariamente. Y tus oraciones puedes realizarlas si es posible frente al Santísimo Sacramento.

Propósito del día: Combatiré despiadadamente mi defecto predominante, después de estudiar por cual motivo hasta ahora he tenido poco éxito en ésta lucha.

Repetir durante el día las Jaculatorias: Donde están dos o tres apelando a mí, ahí estoy yo, en medio de ellos.  (Mt, 18,20); ¡Señor que vea! ¡Que yo te conozca! ¡Ven Espíritu Santo!  “En el nombre del padre del Hijo y del Espíritu Santo, renuncio a satanás, renuncio a sus seducciones, renuncio a sus obras. Amén”.

ORACIONES DEL DÍA:
+En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

VENI CREATOR SPIRITUS
Ven, Espíritu Creador, visita las almas de tus fieles llena con tu divina gracia, los corazones que creaste. Tú, a quien llamamos Paráclito, don de Dios Altísimo, fuente viva, fuego, caridad y espiritual unción. Tú derramas sobre nosotros los siete dones; Tú, dedo de la diestra del Padre; Tú, fiel promesa del Padre; que inspiras nuestras palabras. Ilumina nuestros sentidos; infunde tu amor en nuestros corazones; y, con tu perpetuo auxilio, fortalece la debilidad de nuestro cuerpo. Aleja de nosotros al enemigo, danos pronto la paz, sé nuestro director y nuestro guía, para que evitemos todo mal. Por ti conozcamos al Padre, al Hijo revélanos también; Creamos en ti, su Espíritu, por los siglos de los siglos. Gloria a Dios Padre, y al Hijo que resucitó, y al Espíritu Consolador, por los siglos de los siglos. Amén.

LETANÍAS AL ESPIRITU SANTO
Señor, Ten piedad.
Cristo, Ten piedad.
Señor, Ten piedad.
Cristo, óyenos.
Cristo, Escúchanos.
Dios, Padre celestial, Ten piedad de nosotros.
Dios, Hijo Redentor del mundo,
Dios, Espíritu Santo,
Trinidad Santa, un solo Dios,
Espíritu, que procedes del Padre y del Hijo,
Espíritu del Señor, que al comienzo de la creación incubando las aguas las fecundaste,
Espíritu por cuya inspiración hablaron los santos hombres de Dios,
Espíritu cuya unción nos enseña todas las cosas,
Espíritu que das testimonio de Cristo,
Espíritu de verdad que nos instruyes sobre todas las cosas,
Espíritu que fecundas a María,
Espíritu del Señor que llenas todo el orbe,
Espíritu de Dios que habitas en nosotros,
Espíritu de sabiduría y entendimiento,
Espíritu de consejo y fortaleza,
Espíritu de ciencia y piedad,
Espíritu de temor del Señor,
Espíritu de gracia y misericordia,
Espíritu de fuerza, dilección y sobriedad,
Espíritu de fe, esperanza, amor y paz,
Espíritu de humildad y castidad,
Espíritu de benignidad y mansedumbre,
Espíritu de gracia multiforme,
Espíritu que escrutas hasta los secretos de Dios,
Espíritu que ruegas por nosotros con gemidos inenarrables,
Espíritu que descendiste sobre Cristo en forma de paloma,
Espíritu en el cual renacemos,
Espíritu por el cual se difunde la caridad en nuestros corazones,
Espíritu de adopción de los hijos de Dios,
Espíritu que apareciste sobre los discípulos en forma de lenguas de fuego,
Espíritu del que los apóstoles quedaron henchidos,
Espíritu que distribuyes tus dones a cada uno como quieres,
Senos propicio, Perdónanos, Señor.
Senos propicio, Escuchanos, Señor.
De todo mal, Líbranos Señor.
De todo pecado,
De las tentaciones e insidias del diablo,
De toda presunción y desesperación,
De la resistencia a la verdad conocida,
De la obstinación y de la impenitencia,
De la impureza de la mente y del cuerpo,
Del espíritu de fornicación,
De todo espíritu malo,
Por tu eterna procesión del Padre y del Hijo,
Por la concepción de Jesús, hecha por tu operación,
Por tu descenso sobre Cristo en el Jordán,
Por tu advenimiento sobre los discípulos,
En el día del juicio,
Nosotros, pecadores, te rogamos, óyenos.
Para que, así como vivimos por el Espíritu obremos también por el Espíritu,
Para que, recordando que somos templo del Espíritu Santo, no lo profanemos,
Para que, viviendo según el espíritu, no accedamos a los deseos de la carne,
Para que por el espíritu mortifiquemos las obras de la carne,
Para que no te contristemos a ti, Espíritu Santo de Dios,
Para que seamos solícitos en guardar la unidad de espíritu en el vínculo de la paz,
Para que no creamos a todo espíritu,
Para que sepamos discernir los espíritus, si son o no de Dios,
Para que renueves en nosotros el espíritu de rectitud,
Para que nos confirmes por tu espíritu soberano,

Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, Perdónanos Señor.

Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, Escúchanos Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, Ten misericordia de nosotros.

Oremos: Te pedimos, Señor, que nos asista la fuerza del Espíritu Santo para que purifique convenientemente nuestros corazones y nos preserve de todo mal. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

LETANÍAS AL DULCE NOMBRE DE JESÚS
-Señor, ten piedad de nosotros
-Cristo, ten piedad de nosotros
-Señor, ten piedad de nosotros
-Cristo, óyenos
-Cristo, escúchanos,
-Dios, Padre celestial, ten piedad de nosotros
-Dios Hijo, Redentor del mundo,
-Dios Espíritu Santo,
-Santísima Trinidad, un solo Dios,
-Jesús, hijo de Dios vivo,
-Jesús, esplendor del Padre,
-Jesús, pureza de la luz eterna,
-Jesús, rey de la gloria,
-Jesús, sol de justicia,
-Jesús, hijo de la Virgen María,
-Jesús, amable,
-Jesús, admirable,
-Jesús, Dios fuerte,
-Jesús, padre del siglo futuro,
-Jesús, mensajero del plan divino,
-Jesús, todopoderoso,
-Jesús, pacientísimo,
-Jesús, obedientísimo,
-Jesús, manso y humilde de corazón,
-Jesús, amante de la castidad,
-Jesús, amador nuestro,
-Jesús, Dios de paz,
-Jesús, autor de la vida,
-Jesús, modelo de virtudes,
-Jesús, celoso de la salvación de las almas,
-Jesús, nuestro Dios,
-Jesús, nuestro refugio,
-Jesús, padre de los pobres,
-Jesús, tesoro de los fieles,
-Jesús, pastor bueno,
-Jesús, verdadera luz,
-Jesús, sabiduría eterna,
-Jesús, bondad infinita,
-Jesús, camino y vida nuestra,
-Jesús, alegría de los ángeles,
-Jesús, rey de los patriarcas,
-Jesús, maestro de los apóstoles,
-Jesús, doctor de los evangelistas,
-Jesús, fortaleza de los mártires,
-Jesús, luz de los confesores,
-Jesús, pureza de las vírgenes,
-Jesús, corona de todos los santos, Ten misericordia de nosotros.
-Senos propicio, Perdónanos, Jesús.
-Senos propicio, Escúchanos, Jesús.
-De todo mal, Líbranos Jesús
-De todo pecado,
-De tu ira,
-De las asechanzas del demonio,
-Del espíritu impuro,
-De la muerte eterna,
-Del menosprecio de tus inspiraciones,
-Por el misterio de tu santa encarnación,
-Por tu natividad,
-Por tu infancia,
-Por tu divinísima vida,
-Por tus trabajos,
-Por tu agonía y Pasión,
-Por tu cruz y desamparo,
-Por tus sufrimientos,
-Por tu muerte y sepultura,
-Por tu resurrección,
-Por tu ascensión,
-Por tu institución de la santísima Eucaristía,
-Por tus gozos,
-Por tu gloria, Líbranos, Jesús.

-Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,   Perdónanos, Jesús.

-Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,     Escúchanos Jesús.
-Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,     Ten misericordia de nosotros Jesús.
-Jesús, óyenos.
-Jesús, escúchanos, Se repite

Oración: Te pedimos Señor, que quienes veneremos el Santísimo Nombre de Jesús disfrutemos en esta vida de la dulzura de su gracia y de su gozo eterno en el Cielo. Por Jesucristo nuestro Señor. Amen.

AVE MARIS STELLA
Salve, estrella del mar, Madre santa de Dios y siempre Virgen, feliz puerta del cielo. Aceptando aquel «Ave» de la boca de Gabriel, afiánzanos en la paz al trocar el nombre de Eva. Desata las ataduras de los reos, da luz a quienes no ven, ahuyenta nuestros males, pide para nosotros todos los bienes. Muestra que eres nuestra Madre, que por ti acoja nuestras súplicas. Quien nació por nosotros, tomando el ser de ti. Virgen singular, dulce como ninguna, líbranos de la culpa, haznos dóciles y castos. Facilítanos una vida pura, prepáranos un camino seguro, para que viendo a Jesús, nos podamos alegrar para siempre contigo. Alabemos a Dios Padre, glorifiquemos a Cristo soberano y al Espíritu Santo, y demos a las Tres personas un mismo honor. Amén.

Leer el Santo Evangelio según San Juan 20, 1-31

Del tratado de la verdadera devoción. TVD 270-273
270. Después de la sagrada comunión, estando recogido interiormente y cerrados los ojos, introducirás a Jesucristo en el corazón de María. Se lo entregarás a su Madre, quien lo recibirá con amor, lo tratará como Él lo merece, lo adorará con todo su ser, lo amará perfectamente, lo abrazará estrechamente y le rendirá en espíritu y verdad muchos obsequios que desconocemos a causa de nuestras espesas tinieblas.

271.
O te mantendrás profundamente humillado dentro de ti mismo, en presencia de Jesús que mora en María. O permanecerás como el esclavo a la puerta del palacio del Rey, quien dialoga con la Reina. Y mientras ellos hablan entre sí, dado que no te necesitan, subirás en espíritu al cielo e irás por toda la tierra a rogar a las creaturas que den gracias, adoren y amen a Jesús y a María en nombre tuyo: Vengan, adoremos, etc. (Sal 94 [93],6).


272.
O pedirás tú mismo a Jesús, en unión con María, la llegada de su reino a la tierra por medio de su santísima Madre, o la divina Sabiduría, o el amor divino, o el perdón de tus pecados, o alguna otra gracia, pero siempre por María y en María, diciendo mientras fijas los ojos en tu miseria: No mires, Señor, mis pecados (ver Sal 51 [50],11), sino las virtudes y méritos de María. Y, acordándote de tus pecados, añadirás: Es obra de un enemigo (Mt 13,28). Yo soy mi mayor enemigo, yo cometí esos pecados. O también: Sálvame del hombre traidor y malvado (Sal 43 [42],1), que soy yo mismo.
O bien: “Jesús mío, conviene que tú crezcas en mi alma y que yo disminuya” (ver Jn 3,30). María, es necesario que tú crezcas en mi alma y que yo sea menos que nunca. Crezcan y multiplíquense (Gén 1,28). ¡Oh Jesús! ¡Oh María! ¡Crezcan en mí! ¡Multiplíquense fuera, en los demás!

273.
Hay mil pensamientos más que el Espíritu Santo sugiere, y te sugerirá también a ti, si eres de verdad hombre interior, mortificado y fiel a la excelente y sublime devoción que acabo de enseñarte. Pero acuérdate de que cuanto más permitas a María obrar en tu comunión, tanto más glorificado será Jesucristo. Y de que tanto más dejas obrar a María para Jesús, y a Jesús en María, cuanto más
profundamente te humilles y los escuches en paz y silencio, sin inquietarte por ver, gustar o sentir. Porque el justo vive en todo de la fe, y particularmente en la sagrada comunión, que es acto de fe: Mi justo vive de su fidelidad (Heb 10,38).

ORACIÓN DE SAN AGUSTÍN A JESÚS
Tú eres, ¡oh Cristo!, mi Padre santo, mi Dios misericordioso, mi rey poderoso, mi buen pastor, mi único maestro, mi mejor ayuda, mi amado hermosísimo, mi pan vivo, mi sacerdote por la eternidad, mi guía hacia la patria, mi luz verdadera, mi dulzura santa, mi camino recto, mi Sabiduría preclara, mi humilde simplicidad, mi concordia pacífica, mi protección total, mi rica heredad, mi salvación eterna… ¡Cristo Jesús, Señor amabilísimo! ¿Por qué habré deseado durante la vida algo fuera de ti, mi Jesús y mi Dios? ¿Dónde me hallaba cuando no pensaba en ti? Anhelos todos de mi corazón, inflámense y desbórdense desde ahora hacia el Señor Jesús; corran que mucho se han retrasado; apresúrense hacia la meta, busquen al que buscan. ¡Oh Jesús! ¡Anatema el que no te ama! ¡Rebose de amargura quien no te quiera! ¡Dulce Jesús! ¡Que todo buen corazón dispuesto a la alabanza te amé, se deleite en ti, se admire ante ti! ¡Dios de mi corazón! ¡Herencia mía, Cristo Jesús! Vive, Señor, en mí; enciéndase en mi pecho la viva llama de tu amor, acrézcase en incendio; arda siempre en el altar de mi corazón, queme en mis entrañas, incendie lo íntimo de mi alma, y que en el día de mi muerte comparezca yo del todo perfecto en tu presencia. Amén.

MAGNIFICAT
+ Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador, porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí. Su nombre es Santo y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hace proezas con su brazo, dispersa a los soberbios de corazón. Derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos despide vacíos. Auxilia a Israel su siervo, acordándose de su misericordia según lo había prometido a nuestros padres en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo como era en principio ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.

Rezo del Santo Rosario correspondiente al día
(Clic aquí)

Ofrecer el Santo Rosario; Rezar el Credo; Rezar los 5 misterios correspondientes al día, finalizar cada misterio con un Gloria y jaculatorias; Al finalizar el Santo Rosario rezar por las intenciones del Santo Padre, ofrecer las 3 Ave María, Gloria y la Salve por nuestra diócesis y nuestro obispo.
Finalizar con las Letanías a la Santísima Virgen: (Clic Aquí)

Oración final y ofrecimiento del día: (Clic Aquí)
+En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

SALVEMOS VIDAS. SEMBREMOS ESPERANZA. ESCUCHEMOS SUS LATIDOS.